Por Redaccion 
El gobierno municipal de Lorca denunció la negligencia institucional después de cuatro meses de silencio y sin recibir un euro prometido para reparar las infraestructuras municipales dañadas por las lluvias torrenciales de marzo. El alcalde, Fulgencio Gil Jódar, calificó de «negligencia grave» la falta de información oficial sobre la ayuda, abandonando a los vecinos afectados y denunciando la violación del acuerdo del Consejo de Ministros del 1 de abril.
En una situación delicada, los proveedores exigen el pago, mientras los lorquinos deben asumir los gastos que debería cubrir el estado. Gil Jódar criticó duramente al gobierno de Pedro Sánchez por su falta de respuesta y compromiso con la ayuda prometida para reparar los daños causados por las lluvias torrenciales.
A pesar del anuncio oficial realizado el 1 de abril, el contenido del acuerdo no se ha enviado al Consejo Municipal ni a los ciudadanos, quienes carecen de información sobre el proceso de ayuda. Esta situación deja a los lorquinos abandonados por el gobierno, sin tener a quién recurrir.
El alcalde recordó que el Pleno Municipal aprobó una moción exigiendo medidas de emergencia al gobierno central, debido a la falta de presupuestos generales, incumplimientos en las entregas prometidas al municipio y la transferencia inmediata de fondos correspondientes a impuestos estatales.
Actualmente, el Consejo Municipal de Lorca no recibe más de 270.000 euros al mes, lo que representa más de 1,6 millones de euros en deuda. Esta situación insostenible pone en peligro la estabilidad económica del municipio y la continuidad de los servicios públicos esenciales. Los ahorros de los lorquinos deben ser revertidos, ya que se ven obligados a cubrir competencias que corresponden al estado, como la seguridad ciudadana o los gastos derivados de desastres naturales.
La falta de respuesta y compromiso por parte del gobierno central ha generado una crisis en Lorca, donde los ciudadanos se encuentran desamparados y sin la ayuda prometida para reconstruir después de las devastadoras lluvias torrenciales de marzo. La situación económica del municipio se ve amenazada, y la incertidumbre reina entre los afectados por esta negligencia institucional.
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